Reportaje: Javier Marqués
Redacción. Fin de semana de auténtico lujo para los amantes de las motos clásicas… y de las dos ruedas en general. Compartimos junto a las “Motoabuelas” jornada y asfalto, para conocer un poco mejor a estas veteranas de nuestras carreteras.
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Algunas ejercieron como piezas clave en conflictos bélicos, otras fueron estandarte tecnológico de su época y, la gran mayoría, actuaron como fieles compañeras de ocio, trabajo y vida familiar. Sin embargo todas ellas tienen algo en común; guardan en sus cuidadas mecánicas un relato vivo de nuestra historia.
El pasado domingo, y gracias al Club Motoabuelas de la Ribera (organizadora del evento) recorrimos junto a casi 200 monturas clásicas varias localidades ribereñas demostrando que el tiempo… apenas ha hecho mella en ellas.
Diez de la mañana, en la Pradera del Arroyo de Castrillo de la Vega reina un ambiente festivo, mientras algunos reponen fuerzas tras el guateque nocturno, otros prolongan la fiesta a ritmo de música de los años 60. En el centro del paraje, y sobre el césped, la altiva estampa de más de un centenar de motos clásicas. Jóvenes iniciados en el mundo del motor, junto a pilotos casi casi centenarios, comparten espacio y pasión en un certamen 2010 que, tal y como nos confirma la propia organización, registra un número aún mayor de inscritos que el pasado año.
Veteranas… pero muy ruteras.
Apenas media hora después se inicia la ruta. Una imponente sinfonía de motores de dos tiempos, cuatro tiempos, monocilíndricas, pluricilíndricas… parte desde Castrillo de la Vega hacia la plaza Mayor de La Vid (ver mapa GPS), atravesando antes las localidades de Fuentespina, Fuentelcésped, Santa Cruz de la Salceda y Vadocondes. La atenta labor tanto de la Guardia Civil como de los miembros de la Organización nos permite transitar con total seguridad y disfrutando en todo momento de la ruta.
Algunas veteranas precisan de un pequeño alto en el camino… para tomar fuerzas. Sin embargo, todas llegan sin mayores problemas a la plaza mayor de La Vid dónde se conforma una improvisada exposición que hace las delicias de los habitantes de la localidad. A continuación, visita al Centro de Enoturismo y Bodega “El Lagar de Isilla” dónde recibimos una auténtica clase magistral sobre Historia y Enología, a cargo de todo un experto en la materia: D. José Zapatero (en la foto superior junto a Juan Pedro Olivares).
Tras éste formativo y necesario descanso, enfilamos ruta hasta la vecina Peñaranda de Duero y continuando el recorrido por Zazuar, Quemada, Villanueva de Gumiel, Sinovas, recorrido urbano por Aranda de Duero… y regreso a Castrillo de la Vega.
Una experiencia, sin duda, formidable gracias en buena medida al denodado trabajo de la Organización que, año tras año y edición tras edición, ha sabido convertir una pequeña reunión de motos clásicas en un todo evento cultural reconocido a nivel nacional. Sólo nos queda desear la pronta llegada de la edición 2011 de las “Motoabuelas”… y de una “unidad móvil” más acorde al evento que la exhibida este año.
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Este articulo fue publicado el 23 Agosto 23UTC 2010 a las 2:38 pm y esta archivado en Cultura. Puedes suscribirte a los comentarios en el RSS 2.0 feed. Puedes escribir un comentario, o hacer trackback desde tu propia web.
